BAG IN BOX
Bag in box: agua en cartón para cuidar del planeta
Un envase innovador y respetuoso con el medio ambiente: agua en cartón en formato Bag in Box, disponible en formatos de 10 litros (actualmente con 1 litro de regalo) y de 20 litros. Se trata de un formato revolucionario en el mundo del agua: una bolsa con un grifo dispensador en una caja de medidas 20 x 20 x 30 cm.
Este nuevo envase de Fuentes de Lebanza ha supuesto una revolución en el sector del agua mineral en España y en algunos países europeos, tanto por la comodidad para los usuarios como por el respeto al medio ambiente. A diferencia de los bricks tradicionales, fabricados con un material que incorpora cartón y plástico, nuestro bag in box incluye estos dos materiales por separado, lo que hace que sea mucho más fácil de reciclar y que su impacto en el medio sea menor.

¿Cómo es nuestro envase de agua en caja de cartón?
La tecnología nos ha permitido combinar polímeros para crear una bolsa completamente hermética y flexible, que garantiza la pureza y la perfecta conservación del agua. Está compuesta únicamente por 60 gr. de polietileno de alta y baja densidad, lo que asegura un envase casi tan inerte como el vidrio.
El agua se envasa en ella en condiciones estériles de vacío para mantener intactas sus propiedades hasta la última gota. Tanto durante el proceso de envasado como durante su uso, la entrada de aire ambiente en la bolsa es nula y, por lo tanto, se evita la entrada de bacterias procedentes del exterior, con la contaminación que esto conllevaría.
La bolsa de agua viene dentro de una caja de cartón, un material reciclable y con un tiempo de descomposición muy escaso, motivo por el cual el bag in box es nuestra gran apuesta en el camino hacia la sostenibilidad y el cuidado del planeta. Los países nórdicos, referentes en materia de conciencia medioambiental, son grandes defensores de este formato.

Ventajas del formato de agua en cartón Bag in Box
Un formato de agua mineral más rentable para tu negocio
El agua en caja de cartón o Bag in Box es un formato que incrementa la rentabilidad en los establecimientos comerciales, debido a su rendimiento por metro lineal. Ocupa el mismo espacio que una garrafa de 5 litros, pero contiene 11 litros, lo que aumenta en un 256% la rentabilidad. Además es apilable hasta 5 alturas, por lo que el aprovechamiento del espacio es mayor tanto en supermercados como en el propio hogar.